viernes, 16 de enero de 2009

Alerta temprana


Por: Consejo Comunitario La Playa Renaciente


A Todas Las Organizaciones Sociales, Políticas, Culturales, Sindicales, Defensoras De Derechos Humanos, Nacionales E Internacionales.

Nosotros (as) el Consejo Comunitario de Negritudes La Playa Renaciente, solicitamos su solidaridad y acompañamiento en el proceso de resistencia contra el atropello, que pretende llevarse a cabo, por parte de la procuraduría judicial ambiental y agraria del valle y la inspección de policía del siete de agosto de la ciudad de Santiago de Cali; con el desmonte de toda la infraestructura creada y organizada por los trabajadores de arena habitantes tradicionales de este sector y con ellos nuestra cultura de trabajo tradicional, y medios de subsistencia por el cual se mantienen setenta y cinco familias directa e indirectamente.

De nuestros ancestros aprendimos a trabajar y convivir en y con el río; ahora que hay intereses económicos y turísticos en nuestro territorio, nos declaran, invasores, ilegales, y causantes del deterioro del ambiente.

Nosotros (as), como comunidad organizada, hemos presentado propuestas para desarrollar el turismo, y presentamos una serie de proyectos para mejorar nuestro entorno y preservar el medio ambiente; ante lo que la administración pública ha dado pocas respuestas y ninguna acción concreta de apoyo a nuestras iniciativas.

El veinte seis de diciembre se emite el oficio No. 3600021-0660-08 donde se solicita al alcalde adopte las medidas necesarias para suspender la actividad de minería denominada como ilegal parte de la administración pública sin tener en cuenta que somos un consejo de comunidad negra, que es una actividad tradicional en nuestra comunidad la extracción de arena y debe respetarse el derecho al desarrollo de las comunidades de acuerdo a sus costumbres ancestrales

En el oficio mencionado nos dan 10 días para desmontar las maquinas. Pretenden arrebatar nuestros medios de subsistencia, tradiciones, culturales, sociales, la identidad y arraigo que tenemos con el sector y con el río.

Este es solo uno más de los ataques emprendidos contra nosotros por parte de los entes gubernamentales desde que las multinacionales pusieron sus ojos en nuestro territorio para el desarrollo de sus proyectos.

Esperamos contar con su apoyo.

Aportando a una Cali Mejor

Por: Comité de Comunicaciones

La prensa caleña, tanto a nivel de radio, impresa y televisión, registró con asombro y extrañeza, que un proceso invisible para el resto de la ciudad, fuera reconocido como la mejor experiencia de trabajo comunitario que viene contribuyendo desde hace muchos años, a construir una mejor ciudad. En medio de una mar de imprecisiones tal vez por ignorancia o tal vez con una marcada intención, los comunicadores de escuela registraron el premio otorgado al Consejo Comunitario Ancestral La Playa Renaciente, catalogándolo entre otros errores, como una “invasión” que se ha ido organizando, desconociendo los procesos socio-históricos que hemos vivido desde el siglo pasado, como moradores y dueños de esta parte del territorio colombiano.

El premio fue otorgado, al menos en el discurso, en el marco del concurso “Por una Cali Mejor” y en el que participaron más de 200 experiencias en distintos ámbitos culturales y sociales de la ciudad y fue entregado, entre otras organizaciones, por la Fundación Corona, el Periódico El País, la casa Editorial El Tiempo, Plan Internacional, la Cámara de Comercio, entre otros.

No obstante, es importante recalcar que si bien el premio no es uno de nuestros grandes o significativos logros, es un elemento importante para seguir adelantando nuestro proceso de resistencia, ahora con pequeñas luces de visibilización a otros públicos habitantes de la ciudad que a diario se alimenta de nuestro trabajo y vive en hogares construidos con los productos de nuestra labor pero que habitan nuestra ciudad ignorando nuestra presencia o en el peor de los casos, temiéndonos ante el estigma que desde hace muchos años, nos ha sido asignado.

Este premio, que aun no entregan por cualquier cantidad de trabas burocráticas, bienvenido sea si ha de aportar, pero si ha de convertirse en una excusa para que los enemigos de nuestro proceso libertario, aprovechen para debilitarnos e intervenirnos de la manera que no queremos y que no nos conviene, pues que siga su camino. De nuestra parte, seguiremos trabajando por la reivindicación de la etnia, de nuestro entorno cultural, de nuestra historia y por el derecho al trabajo y al territorio.

Las Aguas de la discordia

Por: Marleny Madrid Gómez



¿Se ha preguntado alguna vez qué pasa con el agua que usualmente utilizamos en nuestras casas o empresas y qué pasa luego a los alcantarillados? Sabemos que estas aguas son transportadas a través de los diferentes canales de aguas negras y luego son llevadas al río Cauca; lo que no sabemos muchos de nosotros es el gran daño tanto ecológico como ambiental que este suceso ocasiona tanto al río como a las poblaciones aledañas a la rivera del mismo.
Tal es el caso de los habitantes del territorio Consejo comunitario ancestral La Playa Renaciente, quienes están ubicados en la zona correspondiente a la parte baja del jarillón entre la vía a Candelaria (puente de Juanchito) y la planta de tratamiento de agua de Puerto Mallarino y quienes actualmente y según las entidades gubernamentales, constituyen hoy la Vereda Cauquita.
Estas personas quienes han sido tildadas de ocasionar gran daño ecológico a la rivera y al afluente del río, ya que sus viviendas se encuentran muy cerca a la orilla del río, son conscientes de lo delicado de este tema y de cómo las entidades pertinentes no se percatan del grave problema de contaminación ambiental y por otra parte, los graves problemas de salud que ha generado por mucho tiempo en los residentes de esta zona.
Es así como se desarrollan numerosas infecciones respiratorias principalmente en los niños residentes en este lugar, así como también en las personas con las guas residuales desarrollando frecuentemente infecciones en la piel, las cuales les producen comezón, salpullidos y es de anotar, que en la zona a la cual me refiero en este artículo se encuentran con dos diques en apenas dos kilómetros.
Por otra parte debemos tener en cuenta que estos diques no surgen en esta zona, sino que vienen de lugares como por ejemplo, Puerto Rellena o Valle del Lili, atravesando gran parte de la ciudad y recogiendo a su paso, toda clase de desechos para terminar en el río Cauca y en medio de una población que parece invisible para las autoridades competentes quienes al parecer están más interesadas en la manera en que una comunidad como esta, contribuye al desequilibrio del río que en resolver problemas como los generados por las decisiones que arbitrariamente y sin mirar hacia el futuro fueron tomados por personas que lógicamente no tendrían consecuencias estas decisiones.
Quedan entonces varias preguntas en el aire: ¿por qué no se toman medidas en el asunto? ¿Por qué no se cierran estos diques? ¿Quiénes son los verdaderos contaminantes del río?

De donde vienen las basuras que pasan por el rio Cauca

Por: Eduard Escobar Sánchez

El Río cauca se encuentra ubicado en Colombia y su nacimiento se presenta justo en la zona conocida como Macizo Colombiano. La ribera de este portentoso río Cauca, empieza en el macizo colombiano y desemboca en el brazo de la Loba en otro de los grandes ríos de nuestro país, el Magdalena, recorriendo el país de norte a sur pasando por el Valle del Cauca, Risaralda y Antioquia.
Las aguas del rio cauca durante los últimos 10 años han estado afectadas por la suciedad generada por las comunidades, y que dañan la imagen exterior del río y obviamente la parte interna, perjudicando mortalmente a toda la variedad de fauna que encuentra en él, su habitat. Pero los hombres y mujeres que residen en la parte del valle del cauca supuestamente son los culpables, pero no se tiene en cuenta que las impurezas que pasan por el Valle, no son del Valle, sino que son aportadas desde otras partes aledañas ubicadas más arriba del cauce que atraviesa nuestro departamento.
Sin embargo, el Municipio a través de sus autoridades, denuncia que los habitantes de la parte del Valle y específicamente los habitantes de la Playa Renaciente, son los que arrojan la basura al Río sólo para sacarlos de la gran riqueza que constituye las playas del rio cauca y construir un centro comercial llamado “Río Cauca” porque saben que esta es una zona demasiado rica en cuanto a recursos naturales o como se dice, una “joya en bruto” con la que tenemos dos tareas clave, cuidarla y pulirla.

Mis días en La Playa



Por: Baldemar Aguirre





Mis días en la playa no son los de gloria,
tampoco diría que son lo peor,
tan sólo son parte de mi triste historia,
como siempre escrita con gozo y dolor.

Es lume y marismo mi habitual faena
contra mi rutina en real rebelión,
me dirijo al río y sobre la arena,
me harto de vinete, viche y arrechón.

Después de la siesta regreso a la playa
y a orillas del Cauca empiezo a observar,
a Herminio lanzando al río su atarraya,
y a un niño imprudente lanzarse a nadar.

Valientes, robustos, fornidos paleros
tirando la arena del bote al solar,
mientras tres expertos fuertes volqueteros
Esperan paciente la carga llegar.

Lea va ofreciendo grandes chontaduros,
Nelsa limonada, arroz y perico,
Leonor manga verde, aguacate maduro,
Esperanza papa y pescado frito.

Y como ellas, otras veinte vendedoras
en su lucha diaria suelen demostrar,
que son heroínas, que son vencedoras,
orgullo y ejemplo de este gran lugar.

Y yo silencioso buscando en el río
una causa viva y un porqué luchar,
pensando que todos son amigos míos
¿por qué con ninguno puedo interactuar?

La noche se acerca y una fresca brisa
me toca y coqueta me dice al oído,
que el mundo se compra con una sonrisa,
que todo lo tengo, que nada he perdido.

Recojo mi chiro, giro la cabeza
y doy media vuelta dispuesto a seguir,
de pronto una negra de franca belleza
Figura imponente y alegre reir,

Se cruza a mi paso y con ruda realeza
me fuerza a mirarla y a no resistir,
a ese satanismo que con sutileza,
nos arrastra aciaga a gozar y sufrir

Sus ojos ladrones se roban mi calma
pero me regalan un chis de emoción,
me animo un instante y descubro que en mi alma
todavía hay chispa, ternura y pasión.

Mis ojos tragones devoran sus formas,
gozo su mirada, nado en su esplendor,
su risa hechicera seduce y transforma,
mi esplen en sabores, mi frío en calor.

Como recompensa le lanzo un piropo
realzo su simplismo y tonto presumir,
mi corazón salta con gran alboroto
y mi mente grita: ¡déjala partir!

Contando los pasos regreso a mi choza,
con esa prudencia que otorgan los años
portando la imagen de esa bella moza
huyendo de gozo y esquivando el daño.

Ya están diminutos mis días en la Playa
y mucho lamento no dejar en ella,
mi rosal sembrado antes que me vaya
pero es preferible ocultar mis huellas.